El Gobierno de Canarias entrega a la viticultora y bodeguera Eufrosina Pérez, el Premio a la Mujer Rural Canaria 2017. El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero, junto a la directora del Instituto Canario de Igualdad (ICI), Claudina Morales, entregaron hoy en Santa Cruz de La Palma, los XXVI Premios Agrarios, Pesqueros y Alimentarios que reconocen en esta edición el importante papel de las mujeres en el sector primario. La viticultora y bodeguera palmera Eufrosina Pérez, propietaria de Vinos El Níspero, recibió el Premio a la Mujer Rural Canaria 2017, máximo galardón de este certamen, convocado por la Consejería de Agricultura.
Para la concesión de este premio el jurado ha valorado especialmente la actitud emprendedora y dinamizadora de la galardonada, «pionera en su isla en un subsector especialmente masculinizado» así como su «magnífica trayectoria profesional y la elevada calidad de sus productos». Las distinciones honoríficas, un total de siete, concedidas a mujeres del sector que en el trascurso de su trayectoria profesional han realizado, de forma continuada y relevante, actuaciones en beneficio del sector agrario, pesquero y alimentario del Archipiélago, recayeron en Nancy Acosta (El Hierro), Nicolasa Castro (Fuerteventura), Natalia y Beatriz Mayor (Gran Canaria), Armenia Mendozal (La Gomera), Luz Nélida Parque (Lanzarote), Martina Rasi-Rüger (La Palma) y Carmen Soto (Tenerife).
Durante el acto, organizado por la Consejería de Agricultura con el apoyo del Instituto Canario de Igualdad, el consejero, Narvay Quintero, felicitó a las galardonadas y destacó que es incuestionable el papel que han desempeñado y desempeñan las mujeres en el sector primario y se refirió a la necesidad de que la sociedad «reconozca sus valores y su esfuerzo», así como de seguir trabajando desde los distintos ámbitos para promover y favorecer la igualdad real y efectiva, promoviendo la participación de éstas en la agricultura, ganadería y pesca de manera profesional, mejorando la participación femenina en las organizaciones agrarias, visibilizando a las mujeres como trabajadoras agrarias, y fomentando la igualdad y la mejora de la calidad de vida de la población rural». Por su parte Claudina Morales dijo que «las mujeres rurales representan el pasado y presente del desarrollo rural y socioeconómico de Canarias; y también del futuro, por su capacidad emprendedora e innovadora. Y merecen disfrutar plenamente de los beneficios y oportunidades de dicho desarrollo».
La premiada Eufrosina Pérez, señaló que «este galardón inesperado supone mucho para mí ya que es una recompensa a mi trabajo; es una palmadita en la espalda que me llena de satisfacción y queda en la memoria de todos; además no es un premio sólo para mí, sino para todas las mujeres que trabajamos en el campo, dentro y fuera de casa, y estamos poco reconocidas y valoradas». Las candidatas a estos premios fueron propuestas por universidades y administraciones locales, además de la propia Consejería.
Premio a la Mujer Rural Canaria, empresaria, que haya destacado en su actividad y sea única titular de la explotación agraria: Eufrosina Pérez Rodríguez, viticultora y bodeguera, propietaria de la marca «El Níspero», por su magnífica trayectoria, por ser pionera en su isla en un subsector especialmente masculinizado, por su emprendeduría, y por la elevada calidad de sus productos.
Distinción Honorífica por la isla de El Hierro: Nancy Acosta Acosta entendiendo que destaca por la comercialización de productos ecológicos y la dinamización del sector, reflexionando que estos factores conforman de por sí, una magnífica trayectoria relacionada directamente con el ámbito competencial de la Alimentación, y por lo tanto, digna de reconocimiento, como ejemplo para visibilizar a las mujeres comercializadoras dinamizadoras del sector.
Distinción Honorífica por la isla de Fuerteventura: Nicolasa Castro Roger, por su trayectoria en la agricultura, la ganadería y la distribución, al frente de su empresa familiar, además de la quesería «La Pared», y al ser firme representante de la emprendeduría y el fomento del empleo en varias de las áreas del sector de la isla, especialmente en el agrario y en la distribución de su producción.
Distinción Honorífica por la isla de Gran Canaria: Natalia y Beatriz Mayor Monzón: jóvenes ganaderas trashumantes y emprendedoras, cotitulares de la quesería Naroy, como firmes representantes de la innovación combinada con los sistemas tradicionales, personificando el relevo generacional en el subsesector, la pasión por el trabajo y el futuro de la mujer en el sector primario.
Distinción Honorífica por la isla de La Gomera: Armenia Mendozal Meni de vinos «Bodega Montoro», perteneciente al Consejo Regulador de la DO Vinos de La Gomera. Destaca por su carácter emprendedor y colaborativo promoviendo iniciativas de mejora en la elaboración y comercialización de la producción insular , como ejemplo para visibilizar a las mujeres bodegueras y valorar y reconocer su profesión.
Distinción Honorífica por la isla de Lanzarote: Luz Nélida Parque Rodríguez, ganadera y titular de la quesería «Flor de Luz» como claro exponente de la realidad social del sector primario que se está consolidando en Canarias, que responde a una mujer emprendedora, innovadora, que difunde y publicita su producción en redes y que, aún siendo una maestra quesera consolidada y galardonada, aúna tradición y vanguardia buscando nuevas fórmulas en la elaboración y mejora de sus productos.
Distinción Honorífica por la isla de La Palma: Martina Rasi-Rüger, agricultora ecológica (platanera) por sus técnicas innovadoras de permacultura, su fomento de los productos ecológicos, y la difusión y dinamización de la ecología y de sus sistemas de cultivo a través de la formación y la práctica del ecoturismo.
Distinción Honorífica por la isla de Tenerife: Carmen Soto Barrera, pescadora y patrona de la embarcación «El Vidal», cuya juventud, formación, capacitación y profesionalización, simbolizan el necesario relevo generacional y el cambio cultural que se está produciendo en el subsector de la pesca en Canarias, en el que se va imponiendo poco a poco un giro hacia la igualdad de género, y valorar y reconocer la dureza de su profesión.