El vino no solo se saborea, también se respira, se pisa y se cultiva con respeto. En una época donde cada vez más buscamos productos con alma y compromiso, Bodegas Insulares Tenerife y Bodega Presas Ocampo han dado un paso que las sitúa a la vanguardia del vino responsable: ambas acaban de obtener la certificación “Sustainable Wineries for Climate Protection” (SWfCP). Y no es un paso cualquiera: son las primeras en lograrlo en todo el archipiélago canario.
Este reconocimiento, otorgado por la Federación Española del Vino (FEV) y auditado por AENOR, es el más riguroso y completo a nivel nacional en cuanto a sostenibilidad vitivinícola. En un país con más de 4.000 bodegas registradas en denominaciones de origen, solo 103 han superado el exigente proceso para obtener este sello. Ahora, Tenerife entra en ese selecto grupo con dos bodegas adscritas a la D.O. Tacoronte-Acentejo.
Mucho más que un sello: una filosofía de trabajo
Esta certificación evalúa la sostenibilidad en cuatro áreas clave:
- Medioambiental: cuidado del suelo, biodiversidad, eficiencia energética, reducción de emisiones…
- Social: bienestar de trabajadores y proveedores, conexión con el territorio y la cultura local.
- Económica: eficiencia, resiliencia y viabilidad de los modelos de negocio.
- Gobernanza: ética, gestión y transparencia en la comunicación de prácticas sostenibles.
El proceso no ha sido breve ni sencillo. A instancias del Consejo Regulador Tacoronte-Acentejo, ambas bodegas comenzaron en 2024 un riguroso camino de transformación, con el asesoramiento de la consultora ISEMAREN y el respaldo económico del Cabildo de Tenerife, a través de su Servicio Técnico de Calidad y Valorización Agroalimentaria. Un esfuerzo conjunto que hoy marca un hito en la viticultura canaria.
Vino con propósito: más allá del sabor
La obtención del sello SWfCP no solo es una credencial de prestigio nacional e internacional. Supone además:
- Una ventaja competitiva como bodega sostenible.
- Acceso preferente a financiación verde, con condiciones ventajosas.
- Mayor puntuación en programas de apoyo al sector vitivinícola.
- Un camino claro hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
- Y lo más importante: una transformación real que se traduce en procesos más eficientes y respetuosos con el entorno.
Desde la D.O. Tacoronte-Acentejo, no es la primera vez que se trabaja en esta línea. Ya se han promovido estudios y análisis sobre los impactos medioambientales del sector, con aportaciones destacadas como las del economista Santiago Barroso Castillo, que han arrojado luz sobre los retos y oportunidades de la comarca.
Un futuro esperanzador para el vino de Canarias
La certificación de Bodegas Insulares Tenerife y Presas Ocampo no es solo un logro individual, sino un precedente para toda la viticultura canaria. Un paso que demuestra que en nuestras islas es posible elaborar vinos de calidad, comprometidos con el territorio y con las generaciones futuras.
Brindemos, pues, por un vino que cuida de la tierra como cuida de nuestros sentidos.
Porque ahora, más que nunca, el buen vino también es un vino sostenible.