El otoño se acerca a su fin, las temperaturas bajan y las lluvias van dejando un panorama de verdes en nuestros campos, hierbas y plantas silvestres se apoderan de los suelos y nos alegran la vista con infinidad de matices. Entre tanto verdor destacan los contrastes que nos ofrece el viñedo, que entra en su periodo de descanso vegetativo, a la espera de las frías noches del invierno y la poda que preparen las vides para resurgir espléndidas en la primavera; los rojizos del comienzo de la estación han ido dejando paso a los dorados de sus hojas. Traemos a nuestras páginas esta bella estampa obtenida en la finca de la Bodega Altos de Trevejos en Vilaflor (Tenerife), ella expresa fielmente el paisaje que podemos contemplar en este tiempo.