El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife tiene previsto regular en el plazo de un año la actividad de las conocidas “food trucks” (furgonetas gastronómicas), a través de la modificación de la actual ordenanza municipal, por cuanto esta tendencia gastronómica que lleva la gastronomía sobre ruedas a nivel mundial no está contemplada en el ordenamiento jurídico.
Así lo comentó el fin de semana semana pasado el alcalde, José Manuel Bermúdez, durante la presentación de los tres “food trucks” que estacionaron en la capital durante la celebración de las jornadas de “Plenilunio” el sábado 22 de abril.
El político municipal explicaba que con la promulgación de la ordenanza lo que se pretende, fundamentalmente, en qué lugares de la ciudad pueden estacionar estos vehículos, además de establecer el número de licencias, sin descartar la creación de un espacio conjunto que llevaría por nombre Santa Cruz Food Truck.
El Ayuntamiento de Las Palmas ha sacado a concurso en los últimos dos años hasta 6 licencias municipales para otros tantos “vehículos de venta gastronómica”, dos de ellos dedicados a la venta de productos gastronómicos: La Pepa Café Tranvía y C-Natural, con una licencia que los faculta para servicio de cafetería en una ubicación fija, concretamente en la zona peatonal de Mesa y López.
Una “food truck” en entorno playero
Tras esta primera experiencia con vehículos gastronómicos, el Ayuntamiento de la capital grancanaria anunció el pasado mes de enero la licitación de cuatro licencias para camiones de “venta gastronómica en itinerancia”, en aquellas áreas descritas como “zonas comerciales abiertas y de gran tránsito urbano, carentes de servicios”. El Pueblo Canario, los Jardines de Buenavista, la Plaza de Stagno, el Auditorio Alfredo Kraus, la Plaza de la Música, la Avenida Mesa y López y la calle León y Castillo, a la altura del Parque Romano, son las ubicaciones iniciales que se podrán ampliar en función de la demanda y la agenda de eventos culturales y de ocio de la ciudad.
Estas instalaciones deberán cumplir unas características muy concretas, entre ellas, no podrán superar los 35 metros cuadrados de superficie. Además, debe ser un vehículo móvil, totalmente autónomo, que no precise de conexiones consolidadas. La instalación estará compuesta por material desmontable o móvil que podrá integrar mesas y sillas, adecuadas estéticamente al entorno. Una vez finalizada la jornada laboral, el vehículo no podrá permanecer en la calle. Además deberá vender, exclusivamente, alimentos preparados y/o de especial calidad, bebidas no alcohólicas, golosinas y cotufas. Los adjudicatarios podrán vender, como actividad complementaria, productos turísticos y de mercahandising que, en ningún caso, podrá superar un 10% la actividad principal.
La licencia municipal tendrá una vigencia de un año y será prorrogable anualmente hasta un máximo de cuatro años (más información en http://www.laspalmasgc.es).
Hay empresarios en Gran Canaria que ya utilizan el formato food truck, como es el caso de La Allendeta, la cocina sobre ruedas del grupo Allende Restauración especializada en hamburguesas, burritos, frituras andaluzas, empanaditas, ensaladas, etc.; La Jardinera, venta de perritos calientes de la firma hostelera La Terminal Bar, o Surf Cross, el food truck que la empresa de restauración en ruta SPP ha abierto en la nueva zona del terminal de salidas del aeropuerto de Las Palmas.
