El vino fue el máximo protagonista a través de armonías gastronómicas, catas verticales, presentación de novedades y repaso por referencias consagradas.
La séptima edición de Enofusión reunió al sector del vino durante los días 23, 24 y 25 de enero en Madrid para ceder la palabra al vino y posicionarlo como claro protagonista dentro de la gastronomía, en el contexto de la XV Cumbre Gastronómica Asisa MadridFusión. El programa de El Centro del Vino volvió a ser el centro de atención del Congreso Internacional del Vino, con aforo completo en casi todas sus catas. Las armonías gastronómicas pusieron de relieve la importancia del vino dentro de la gastronomía a través de las referencias de denominaciones como Ribeiro, Catalunya o Prosecco, o las referencias de Freixenet, Makro y los vinos de Toledo. La participación de cocineros destacados del panorama nacional marcan el interés creciente por involucrar al vino, y con nombre propio, dentro de la gastronomía. Otras citas sirvieron para descubrir las nuevas tendencias, como la cata vertical de vinos naturalmente dulces de Bodegas Bentomiz tapados con los tapones de cristal de Vinolok, o los nuevos avances enológicos, con recuperación de variedades y de fincas abandonadas, como el caso de Vintae o Torres. Sin olvidar el repaso a referencias ya reconocidas como las de Château Angélus, Finca Allende o Château Lagrange, entre otras.
Las SpeedTasting volvieron por segundo año a Enofusión, para mostrar una nueva forma de explicar el vino directa y concisa en la que además se destaca la importancia de las redes sociales a la hora de comunicar el mundo del vino. Esta actividad logró más de un millón y medio de impactos en redes sociales, y logró ser trending topic en España durante su desarrollo. En el área expositiva de Enofusión, las Expobodegas acogieron más de 50 empresas del sector, entre grandes grupos, bodegas de toda España y empresas relacionadas. Además, en esta edición, los vinos de Castilla-La Mancha dispusieron de un espacio propio donde exponer referencias de sus nueve denominaciones de origen. Y en el Enobar, se pudo hacer un recorrido por más de 200 referencias.
También hubo tiempo para reconocer la gran labor que realizan las figuras del vino a través de los premios Enofusión 2017. En esta edición se han reconocido dos figuras clave que, desde diferentes perspectivas han hecho evolucionar al mundo del vino. Luis Miguel Beneyto, presidente de la Fundación para la Cultura del Vino, recogió el premio Don Luis Hidalgo a la Trayectoria, por su profusa labor en el sector. Beneyto agradeció el galardón, aunque, como afirmaba, “no me gustan los premios individuales porque no se reconoce el trabajo del equipo y de los colaboradores”. Además, continuaba, “uno nunca termina de aprender, por tanto este premio, en realidad, es incompleto”. Terminó su discurso con una cita de Tácito: “donde acaba el vino, acaba la cultura», algo que, como relataba, ha podido comprobar en la Fundación. El acto continuó con una cata de grandes referencias de Marqués de Riscal, empresa con la que Beneyto tiene relación laboral y personal desde hace más de 40 años.
Fuente: http://www.enofusion.com/