A unos tres kilómetros de Vilaflor en plena comarca de Chasna se encuentra la zona conocida como Trevejos, un caserío agrícola y disperso con terrenos que van desde casi 1.600 metros de altitud, en la zona de la Corona Forestal de Tenerife, hasta los 1.300. De ahí y de la propia característica de altura que define esta parte de la Isla toma el nombre la Bodega Altos de Trevejos. Perteneciente por tanto a la Denominación de Origen Protegida Abona, nos encontramos ante una de las bodegas más jóvenes -algo más de 4 años de antigüedad- y con más impulso que completan el panorama vitivinícola de Tenerife y de Canarias. Su proyecto se basa en aprovechar un enclave extraordinario, una cuidada selección varietal y una elaboración exigente para conseguir vinos únicos y expresivos.
En Trevejos se encuentra su finca, con una superficie de 24 hectáreas dedicadas íntegramente a varietales autóctonos. El suelo donde se asienta, de roca volcánica, se caracteriza por tener una composición franco-arcillosa, con una capa de cultivo de entre 1 y 1,5 metros de espesor. La orientación geográfica garantiza la adecuada insolación para conseguir una perfecta maduración, unido a las condiciones climáticas de altitud, con inviernos fríos y suficiente pluviometría. Por su parte, la bodega se encuentra enclavada en el municipio de San Miguel de Abona, ocupando las instalaciones de una antigua casona señorial de 1800 y que actualmente está catalogada como Bien de Interés Cultural. La simple visita a la bodega ya vale la pena, pero si la unimos a la gama de vinos que en ella se elabora nos encontramos ante una posibilidad única.
Sus vinos ofrecen todo el carácter del suelo y de las variedades de las que parten, así como una complejidad de aromas y matices que los diferencian; en la actualidad se elaboran en Altos de Trevejos blancos, tintos, espumosos y dulce, cubriendo así cualquier demanda del consumidor, pudiendo armonizar con sus vinos las más exigentes necesidades de un menú, desde el aperitivo con un fresco y ligero blanco afrutado, «La Jirafa Afrutada», hasta el postre con el acompañamiento del dulce «Aromas de Trevejos» en elegantísima y original botella.
Blanco seco.- Albillo y Verdello, con tres meses en barrica y graduación de 12,5% vol. Se procede a una maceración en frío y posterior prensado ligero para obtener el mosto flor. Fermenta en depósitos y luego pasa su crianza en barricas para ganar en complejidad.
Tinto.- Baboso Negro y Syrah, con 12 meses en barrica y 14% vol. Se procede a una selección manual tras el despalillado; su proceso de maceración y fermentación se realiza utilizando técnicas de sombrero sumergido para evitar posibles oxidaciones. La maceración es larga, con la finalidad de extraer todo el potencial de las dos variedades. Tras un ligero prensado se fermenta el mosto en barricas de roble francés y pasa a su crianza de un año.
Brut Nature.- Listán Blanco. 12 meses de crianza y 12,5% vol. Para obtener el vino base de este espumoso se realiza una estricta elaboración en blanco; se busca obtener un vino fresco y ligero, perfecto para aplicarle el método champenoise, con la segunda fermentación y la crianza en la botella por al menos un año. Sale a la venta como brut nature, sin adición de azúcar. Este vino es uno de los buques insignia de Altos de Trevejos.
Brut Nature Rosé.- Listán Prieto. 12 meses de crianza y 12,5% vol. Se elabora como un vino blanco y las uvas se someten a un ligero prensado para obtener el color rosado de este exquisito espumoso. El resto del proceso sigue las mismas pautas y tiempos que el Brut Nature blanco.
Mountain Wines.- Esta es una familia de dos vinos tintos monovarietales -Baboso Negro y Vijariego Negro- así como un blanco a partir de uvas de Listán Blanco de cepas viejas y Malvasía Aromática. Con ellos se consigue unos vinos muy complejos en boca y ricos en matices; las variedades utilizadas les otorgan todo el carácter y potencial aromático que le son características.
http://www.altosdetrevejos.com/